2 Samuel 15 - La Nueva Reina Valera 2000 (Adventista)

Libro de 2 Samuel
Capitulos:

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1 - Aconteció después de esto, que Absalón se hizo [de] carros y gente de [a] caballo, y cincuenta que corriesen delante de él.

2 - Y se levantaba Absalón de mañana, y se ponía a un lado del camino de la puerta; y a cualquiera que tenía pleito y venía al rey a juicio, Absalón le llamaba a sí, y le decía: ¿De qué ciudad eres? Y él respondía: Tu siervo [es] de una de las tribus de Israel.

3 - Entonces Absalón le decía: Mira, tus palabras [son] buenas y justas; mas no tienes quien te oiga por el rey.

4 - Y decía Absalón: ¡Quién me pusiera por juez en la tierra, para que viniesen a mí todos los que tienen pleito o negocio, que yo les haría justicia!

5 - Y acontecía que, cuando alguno se llegaba para inclinarse a él, él extendía su mano, y lo tomaba, y lo besaba.

6 - Y de esta manera hacía con todo Israel que venía al rey a juicio; y así robaba Absalón el corazón de los de Israel.

7 - Y al finalizar [un periodo predeterminado de] cuarenta años aconteció que Absalón dijo al rey: Yo te ruego [me permitas] que vaya a Hebrón, a pagar mi voto que he prometido al SEÑOR.

8 - Porque tu siervo hizo voto cuando estaba en Gesur en Siria, diciendo: Si el SEÑOR me volviere a Jerusalén, yo serviré al SEÑOR.

9 - Y el rey dijo: Ve en paz. Y él se levantó, y se fue a Hebrón.

10 - [Pero] envió Absalón espías por todas las tribus de Israel, diciendo: Cuando oyereis el sonido de la trompeta, diréis: Absalón reina en Hebrón.

11 - Y fueron con Absalón doscientos hombres de Jerusalén [por él] convidados, los cuales iban en su sencillez, sin saber nada.

12 - También envió Absalón por Ahitofel gilonita, del consejo de David, a Gilo su ciudad, mientras hacía sus sacrificios. Y fue hecha una grande conjuración, y el pueblo con Absalón se iba aumentando.

13 - Y vino el aviso a David, diciendo: El corazón del varón de Israel [se va] tras Absalón.

14 - Entonces David dijo a todos sus siervos que [estaban] con él en Jerusalén: Levantaos, y huyamos, porque no podremos escapar delante de Absalón; daos prisa a andar, no sea que apresurándose él nos alcance, y arroje [el] mal sobre nosotros, y hiera la ciudad a filo de espada.

15 - Y los siervos del rey dijeron al rey: He aquí, tus siervos [están prestos] a todo lo que nuestro señor el rey eligiere.

16 - El rey entonces salió, con toda su casa a pie; y dejó el rey diez mujeres concubinas para que guardasen la casa.

17 - Salió, [pues], el rey con todo el pueblo a pie, y [se] pararon en un lugar distante.

18 - Y todos sus siervos pasaban a su lado, y todos los cereteos y peleteos; y todos los geteos, seiscientos hombres que habían venido a pie desde Gat, e iban delante del rey.

19 - Y dijo el rey a Ittai geteo: ¿Para qué vienes tú también con nosotros? Vuélvete y quédate con el rey; porque tú [eres] extranjero, y desterrado también de tu lugar.

20 - ¿Ayer viniste, y he de hacer hoy que mudes lugar para ir con nosotros? Yo voy como voy; tú vuélvete, y haz volver a tus hermanos; en ti [hay] misericordia y verdad.

21 - Y respondió Ittai al rey, diciendo: Vive Dios, y vive mi señor el rey, que, o para muerte o para vida, donde mi señor el rey estuviere, allí estará también tu siervo.

22 - Entonces David dijo a Ittai: Ven [pues], y pasa. Y pasó Ittai geteo, y todos sus varones, y todos sus siervos.

23 - Y todos [los de] la tierra lloraron en alta voz; y pasó todo el pueblo el arroyo de Cedrón; y después pasó el rey, y todo el pueblo pasó, al camino que va al desierto.

24 - Y he aquí, también [iba] Sadoc, y con él todos los levitas que llevaban el arca del pacto de Dios; y asentaron el arca del pacto de Dios. Y subió Abiatar después que hubo acabado de salir de la ciudad todo el pueblo.

25 - [Pero] dijo el rey a Sadoc: Vuelve el arca de Dios a la ciudad; que si [yo] hallare gracia en los ojos del SEÑOR, él me volverá, y me hará ver a ella y a su tabernáculo.

26 - Y si dijere: No me agradas; aquí estoy, haga de mí lo que bien le pareciere.

27 - Dijo [aún] el rey a Sadoc sacerdote: ¿No eres tú el vidente? Vuélvete en paz a la ciudad; y con vosotros vuestros dos hijos, tu hijo Ahimaas, y Jonatán hijo de Abiatar.

28 - Mirad, yo me detendré en los campos del desierto, hasta que venga respuesta de vosotros que me dé aviso.

29 - Entonces Sadoc y Abiatar volvieron el arca de Dios a Jerusalén; y se estuvieron allá.

30 - Y David subió la cuesta de las olivas; y la subió llorando, llevando la cabeza cubierta, y los pies descalzos. [También] todo el pueblo que tenía consigo cubrió cada uno su cabeza, y subieron llorando así como subían.

31 - Y dieron aviso a David, diciendo: Ahitofel [también está] con los que conspiraron con Absalón. Entonces dijo David: Enloquece ahora, oh SEÑOR, el consejo de Ahitofel.

32 - Y cuando David llegó a la cumbre [del monte] para adorar allí a Dios, he aquí Husai araquita que le salió al encuentro, trayendo rota su ropa, y tierra sobre su cabeza.

33 - Y le dijo David: Si pasares conmigo, me serás de carga;

34 - mas si volvieres a la ciudad, y dijeres a Absalón: Rey, yo seré tu siervo; como hasta aquí he sido siervo de tu padre, así seré ahora siervo tuyo, [entonces] tú me disiparás el consejo de Ahitofel.

35 - ¿No [estarán] allí contigo Sadoc y Abiatar sacerdotes? Por tanto, todo lo que oyeres en la casa del rey, darás aviso de ello a Sadoc y a Abiatar sacerdotes.

36 - Y he aquí que [están] con ellos sus dos hijos, Ahimaas el de Sadoc, y Jonatán el de Abiatar; por mano de ellos me enviaréis [aviso] de todo lo que oyereis.

37 - Así se vino Husai amigo de David a la ciudad; y Absalón entró en Jerusalén.